Julio Alberto tuvo una vida de altibajos. Vivió durante años en un orfanato, donde forjó una personalidad de hierro que le permitió reponerse a las adversidades. Esta característica fue fundamental para que llegara a jugar en el Barcelona, uno de los clubes de fútbol más importantes del mundo.
 
Sin embargo, su talento se vio opacado por sus adicciones, que lo llevaron a lugares impensados y le hicieron perder toda su fortuna. Además, los problemas familiares y la pérdida de su dinero lo llevaron a vivir en la calle, luego de una carrera marcada por el éxito y la gloria.

La historia de Julio Alberto, el jugador millonario que perdió su fortuna
 
Alberto, nacido en España, vivió una infancia marcada por la adversidad en un orfanato, donde tuvo que enfrentar el hambre y situaciones de abuso. Sin embargo, su determinación lo llevó a alcanzar el éxito en el fútbol profesional. Comenzó su carrera en el Atlético de Madrid, donde se destacó como lateral izquierdo, antes de dar el salto al Barcelona en 1982, club en el que compartió plantel con Diego Armando Maradona.

 
Durante su etapa en el club catalán, cosechó numerosos títulos, entre ellos dos Ligas y tres Copas del Rey, y tuvo el privilegio de representar a la selección española en la Eurocopa de 1984 y el Mundial de 1986.
 
A pesar de sus éxitos deportivos y una vida rodeada de lujos, la carrera de Alberto sufrió un giro inesperado en 1991. La llegada de la depresión y el uso de drogas lo destruyeron, a tal punto que perdió todo lo que había logrado, incluidos amigos y familiares.
 
Tras tocar fondo, encontró la fuerza necesaria para buscar ayuda y embarcarse en un camino de rehabilitación. Su proceso de sanación le permitió regresar al mundo del fútbol, esta vez como entrenador.
 
Fundó la Fundación Relife, una organización dedicada a la prevención y tratamiento de adicciones. Desde entonces, Alberto trabaja para ofrecer segundas oportunidades a aquellos que enfrentan desafíos similares.

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